VIAJE

Este camino ya nadie lo recorre, salvo el crepúsculo.

jueves, abril 24, 2008

Cuyutlán 2006

En la mañana llovía y yo quería
pasar otro rato entre tus muslos
dejar que el amanecer con sus dedos azules
se metiera al cuarto
caricia
Qué bien la pasamos
frente al mar
qué bien ese tiempo espeso y tibio
como caldo que se nos resbala lentamente
hasta el mediodía
qué bien se está a tu lado
sobre todo desnudos
sí, sobre todo eso
a la/s 10:42 p.m.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy buen poema.

4:47 p.m.

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En la vida de un hombre, su época sólo es un momento; su ser, un fluir incesante; su juicio, el débil resplandor de una vela de sebo; su cuerpo, presa de los gusanos; su alma, un remolino inquieto; su forma, oscura; su fama, dudosa. En síntesis, todo lo que es cuerpo es agua en tránsito, todo lo que es alma, sueños y nubes.

Marco Aurelio
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